Vendrán los ángeles y separarán a los malos de entre los justos
El Reino de los Cielos se parece a un tesoro escondido
Ella lo reconoció y le dijo en hebreo: «¡Raboní!», es decir «¡Maestro!»
Por más que oigan, no comprenderán, por más que vean, no conocerán
Arranquen primero la cizaña y átenla en manojos para quemarla, y luego recojan el trigo