Los Obispos y su papel en vida pública.
Ciudad de México.- La Conferencia del Episcopado Mexicano defendió ayer, más que un derecho, el deber de los jerarcas católicos, a iluminar a sus fieles con respecto a la vida pública. Los Obispos Alberto Suárez y Renato Ascencio negaron ser líderes políticos, pero sostuvieron que deben dar su opinión, como pastores, de la realidad nacional. «No se contrapone el ser hombres religiosos pero estar atentos a la realidad; no somos líderes políticos pero sí estamos cercanos a la gente», expresó Monseñor Suárez Inda, vicepresidente de la CEM, durante la conferencia de prensa en la que se dieron a conocer los preparativos rumbo a la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe (CELAM). Monseñor Renato Ascencio, Obispo de Ciudad Juárez, consideró que expresar una opinión pública no significa que estén alejados de su misión pastoral: «Los Obispos no somos ajenos a una sociedad y la problemática en la que está viviendo, y debemos dar una palabra en cada diócesis y a nivel nacional». El tema es secuela de la intervención del martes, de Don Abelardo Alvarado, presidente del Departamento de relaciones Iglesia-Estado de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), que indicó que ante el estancamiento político que vive México, la Iglesia tiene mucho que aportar en la transición democrática.