El verdadero valor del voto de Estados Unidos: una vida humana

El verdadero valor del voto de Estados Unidos: una vida humana

6 de noviembre de 2024 Desactivado Por Regnumdei

Trump también obtuvo el 90% de los votantes que creen que el aborto debería ser ilegal en todos o en la mayoría de los casos, mientras que Harris obtuvo el 9% de los votantes con esta opinión.


A pesar de lo que decían las encuestas en Estados Unidos, Trump ha ganado en votos y en compromisarios. JD Vance, converso al catolicismo en el año 2019 será el vicepresidente de Estados Unidos.

La vicepresidenta de Estados Unidos, la demócrata Kamala Harris, no ha sido rival para el republicano Donald Trump. El magnate republicano ha logrado vapulear a la candidata demócrata a quien ha superado con gran holgura y que ha logrado sacar más de 5 millones de votos de margen.

Donald Trump ha logrado arrebatar estados clave con Pensilvania o Georgia y ha podido mantener con facilidad otros enclaves importantes como Florida, Texas y Ohio. Además, los republicanos también han logrado el control del Senado.

El Mensaje de Trump:

“Mucha gente dice que Dios salvó mi vida por una razón. La razón fue restaurar este país, repararlo. Vamos a cumplir esa misión juntos. La tarea no será fácil pero dejaré mi alma para completar ese trabajo. El trabajo más importante en el mundo”, ha prometido Trump en sus primeras palabras tras declararse vencedor de las elecciones en Estados Unidos.

Trump ha prometido que no va a empezar guerras. «Voy a frenar guerras”, ha dijo desde el escenario. recordando los cuatro años de paz que se vivieron en todo el mundo bajo su mandato de 2016 al 2020.

De acuerdo con la encuesta de salida de The Washington Post, Trump ganó el voto católico nacional con una ventaja de 15 puntos: 56% frente a 41%. Esto representa una victoria mucho mayor entre los votantes católicos en comparación con las encuestas de salida de 2020, que mostraban a Trump con solo una ventaja de cinco puntos sobre el presidente Joe Biden, 52% contra 47%.

El cambio representa un giro de 10 puntos a favor de Trump en 4 años. En las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 2020, aproximadamente el 52% de los votantes católicos apoyaron a Joe Biden, mientras que alrededor del 47% respaldó a Donald Trump. Y en las elecciones de 2016, Donald Trump obtuvo aproximadamente el 52% del voto católico, mientras que Hillary Clinton recibió alrededor del 45%.

La encuesta del Washington Post también encontró que el 69% de los votantes que creen que el aborto debería ser legal en todos o en la mayoría de los casos votaron por Harris, aunque Trump logró obtener el apoyo del 28% de los votantes con esa misma postura.

Trump también obtuvo el 90% de los votantes que creen que el aborto debería ser ilegal en todos o en la mayoría de los casos, mientras que Harris obtuvo el 9% de los votantes con esta opinión.

La encuesta también muestra el apoyo a ambos candidatos en el ámbito religioso:

Católicos (22% de los votantes): Trump obtiene el 56% del apoyo frente al 41% para Harris.
Protestantes/Otros Cristianos (42% de los votantes): Trump lidera con un 62%, mientras que Harris recibe el 37%.
Judíos (2% de los votantes): Harris tiene un amplio apoyo del 79% frente al 21% de Trump.
Otros (10% de los votantes): Harris obtiene el 60% de apoyo, mientras que Trump recibe el 33%, y un 7% restante apoya a otros candidatos.
Ninguna afiliación religiosa (24% de los votantes): Harris lidera con un 72%, mientras que Trump recibe el 25%, y el 3% apoya a otros candidatos.
Una encuesta de salida de Associated Press VoteCast mostró que Trump lideraba entre los votantes católicos, aunque con una ventaja menor de siete puntos en comparación con la encuesta de The Washington Post. Según esta encuesta, Trump obtuvo el 52% del voto católico, frente al 45% de Harris.

Votaciones del aborto en algunos estados

Por desgracia, los votantes de Arizona aprobaron una medida electoral que establecería un supuesto «derecho» fundamental al aborto y prohibiría al estado restringir o prohibir el aborto antes de las 24 semanas. La enmienda de Arizona ha sido la sexta medida para proteger o ampliar el derecho al aborto que se ha aprobado hasta ahora en esta elección. Se produce después de que la Corte Suprema de Arizona permitiera la aplicación de una ley de 1864 que prohibía casi todos los abortos a principios de este año, pero luego la Legislatura la derogó rápidamente.

Otros estados mayoritariamente demócratas como Nueva York, Colorado, Maryland y Missouri también han votado a favor de defender el aborto constitucionalmente.

Por su parte, los votantes de Nebraska rechazaron una propuesta de ley para ampliar el «derecho» al aborto en el estado. La medida habría consagrado en la Constitución de Nebraska el derecho a abortar hasta la viabilidad del feto o más tarde para proteger la salud de la mujer embarazada. Fue una de las dos propuestas de ley que competían por el aborto y que aparecieron en la boleta. La otra propuesta, que fue aprobada, consagra en cambio la prohibición actual del aborto a las 12 semanas en la constitución estatal y permite la posibilidad de seguir luchando contra la lacra del aborto.

Dakota del Sur también rechazó una medida electoral que habría restaurado o protegido el acceso al aborto desde la revocación del caso Roe v. Wade en 2022.

Es evidente que era este el objetivo ideológico por el cual habían impulsado la candidatura de Harris, por sobre las necesidades de la ciudadanía, potenciando las políticas abortistas, de pseudo libertades y de transición sexual en menores, de educación y manipulación woke.

Pues Kamala Harris acepta la derrota pero no renuncia a la lucha para que «la luz vuelva a Estados Unidos». Ya sabemos que dicha luz, obtenida por el derramamiento de sangre de niños en el vientre materno, o de enfermos terminales privados de discernimiento y asistencia vital, no puede venir de un ángel santo y justo, sino del ángel de la mentira y la rebelión ante la santidad y bondad de Dios.

Así lo afirmó el 6 de Noviembre, al día siguiente de su derrota: «Nunca renunciaré a la lucha por un futuro en el que los estadounidenses puedan perseguir sus sueños, ambiciones y aspiraciones; en el que las mujeres de Estados Unidos tengan la libertad de tomar decisiones sobre su propio cuerpo y que el gobierno no les diga qué hacer.» Dejó fuera de sus rumiantes deseos el derecho de los niños en el vientre materno, de los padres progenitores, de niños minusválidos o niños Down, que son los primeros en ser abortados, amparados en las políticas promovidas por Harris y Biden.

Junto con la economía, el aumento del costo de vida, la inmigración y la sanidad, el aborto es uno de los temas que más preocupan a los votantes estadounidenses.

Las elecciones de este 5 de noviembre son las primeras presidenciales desde que, en junio de 2022, el Tribunal Supremo de Estados Unidos anulara un veredicto que dictaminó la libertad de las mujeres de abortar hasta las 24 semanas de gestación. En aquel momento, una mayoría conservadora de los nueve miembros del Tribunal Supremo votó a favor de anular dicha sentencia.

Según la histórica sentencia del caso “Roe vs. Wade”, de 1973, toda mujer en Estados Unidos tenía derecho a decidir por sí misma si continuar o interrumpir su embarazo.

No obstante, desde la decisión del Tribunal Supremo, cada estado ha establecido sus propias normas sobre el aborto, algunas de ellas muy estrictas. En algunos estados gobernados por los republicanos, como Kentucky o Luisiana, el aborto está totalmente prohibido, incluso si fue consecuencia de una violación.

En otros estados, el aborto sólo está permitido al principio del embarazo, es decir, en una fase tan temprana que muchas mujeres ni siquiera se dan cuenta de que están embarazadas.

Donald Trump, expresidente y actual candidato presidencial republicano, nombró en su primer mandato a tres jueces conservadores del Tribunal Supremo, todos los cuales votaron a favor de anular el derecho al aborto en todo el país. Trump está muy orgulloso de ello.

“Fue un gran acto de mi parte”, dijo Trump a principios de septiembre durante el duelo televisivo contra su rival Kamala Harris sobre el fin de la ley del aborto en todo el país. “Hizo falta coraje, y el Tribunal Supremo mostró un gran coraje”.