El Papa reitera condena a »píldora del día despues».
El Santo Padre Benedicto XVI dijo el jueves que los médicos no deben recetar la píldora abortiva porque oculta la «gravedad» de quitar una vida humana, y también se pronunció contra el reconocimiento legal de las uniones gay. Benedicto ratificó las enseñanzas de la Iglesia en materia tanto de aborto como de la santidad del matrimonio entre un hombre y una mujer durante una audiencia con funcionarios de Roma y la región del Lazio, dos asuntos importantes para las elecciones generales de abril. El Papa dijo que las mujeres embarazadas, en particular las que pasan por situaciones difíciles, necesitan ayuda concreta, y que las autoridades deben «evitar introducir drogas que de alguna manera ocultan la gravedad del aborto como elección contra la vida». Italia legalizó el aborto hasta el final del tercer mes de embarazo en 1978, después de una batalla prolongada entre el Vaticano y las fuerzas seculares. Desde hace poco, la píldora abortiva RU-486 está disponible en partes de Italia como tratamiento experimental.
La Conferencia Episcopal Italiana ha reanudado la batalla contra el aborto y la píldora, planteándolo como punto electoral por primera vez desde que los italianos ratificaron la ley en un referendo en 1981 auspiciado por la Iglesia para derogarla. Por otra parte, el pontífice destacó que el matrimonio entre el hombre y la mujer es la piedra fundamental de la sociedad y no una «construcción sociológica intrascendente» que se puede reemplazar. «Es un grave error ocultar el valor y la función de la familia legítima basada en el matrimonio, atribuyendo a otras clases de uniones un reconocimiento legal indebido que no obedece a una necesidad social real», sostuvo. Italia no reconoce las uniones de parejas no casadas.